sábado, 24 de julio de 2010

EL MERCADO LIBRE




El pensamiento político predominante en Argentina posee un fuerte prejuicio en contra del mercado libre; se lo acusa de fomentar la especulación, la concentración de capital y la desocupación. Incluso hay algunos que hasta estiman que el mercado libre ha fracasado en el mundo. En general todas estas ideas parten de una asombrosa ignorancia sobre la naturaleza y desarrollo del proceso de mercado.-

El mercado libre posee dos presupuestos esenciales, sin los cuales no puede existir: 1º) la inviolabilidad de la propiedad privada, y 2º) el reconocimiento de la limitada capacidad humana para conocer la realidad.-
La inviolabilidad de la propiedad privada impone dos consecuencias: la primera, es que nadie, ni el Estado ni un particular, puede privar a otro de sus bienes y derechos; y segundo, que quien decide el uso y destino de los bienes es su propietario, no un vecino, ni un funcionario, ni un iluminado economista.-

Esto último está vinculado con el segundo presupuesto del mercado libre referido más arriba, en el sentido de que, si cada uno de nosotros sólo puede conocer una parte de toda la realidad, nadie mejor que el dueño puede saber lo que le conviene hacer con sus bienes.-

Imaginemos una pregunta ¿cuánto va a valer el trigo dentro de 1 año?. Nadie lo sabe, pero a pesar de ello algunos agricultores deben diseñar su campaña para sembrar trigo ¿cómo lo hacen?. Sólo conocen sus costos, pero no sus ingresos. Obviamente que tratarán de que sus beneficios sean lo más alto posible, pero dado que ignoran cuál puede ser el precio final de venta, en realidad sólo hacen una “estimación” de esos ingresos.-
Las personas para ganarse la vida buscan un negocio en el cual ganar dinero, hacen inversión de tiempo, piden prestado dinero, y ofrecen un servicio o venden algún producto, suponiendo que alguien tendrá interés en comprarlo. Pero en realidad no saben si alguien se lo comprará, ni saben cuál será el precio final de venta, ni tampoco saben si todo lo que vendan le permitirá pagar todos sus gastos y obtener ganancias; como tampoco saben si eso que ahora han decidido hacer le permitirá ganar más o menos dinero que si se hubieran dedicado a otra actividad.-

Esto es igual para el kiosquero más chico, como para la empresa más grande del mundo. Todos ignoran por igual lo que va a pasar en el futuro. Para dar un ejemplo de ello, en la actualidad, la empresa que hasta hace unos pocos años era la automotriz más grande de la Tierra, la General Motor, hoy está al borde de la quiebra producto del inusitado aumento del precio de petróleo. Microsoft, que era la empresa informática más fuerte de la historia, de repente se ve amenazada por la competencia de Google, la cual dentro de unos años también podrá tener problemas; nadie lo sabe.-

Por ese motivo, los países que confían en el mercado libre, la iniciativa individual y protegen la propiedad privada, logran un mejor nivel de vida material, ya que cada empresario y cada trabajador, busca ofrecer el mejor servicio que ellos suponen los otros puedan necesitar; y en caso de que se equivoquen, ellos mismos cambian de rubro, calificación, o ubicación, tratando de encontrar algo que los demás puedan estimar valioso al mejor precio posible.-


La presunción de que el mercado libre puede ser reemplazado por algún Ministerio de Planificación, o por un economista iluminado, que digan lo que hay que producir, donde y a qué precio; es cuanto menos un acto supremo de arrogante soberbia; que ha llevado en todo el mundo y en toda la historia, incluida la Argentina, a empobrecer a la población y, al mismo tiempo, a enriquecer a los pseudo-empresarios amigos del gobierno de turno.-

Por ese motivo Brasil, Uruguay, Chile, Perú, Colombia, entre tantos otros, han elegido al mercado libre como el gran mecanismo para salir de la miseria.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario